En un paso significativo para el reconocimiento y protección de los vinos de Castellón, la Asamblea General de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Castelló ha aprobado el pliego de condiciones para la transición a Denominación de Origen Protegida (DOP), que ha sido presentado a la Conselleria de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca para su tramitación.
Las principales novedades del pliego de condiciones de la DOP Castellón incluyen:
- Ampliación de las zonas amparadas: La DOP Castellón abarcará más municipios que los actualmente incluidos bajo la IGP, integrando todas las áreas con viñedos. Esto permitirá una mayor representación y protección de la producción vitivinícola de la región.
- Creación de seis subzonas vitícolas: Para resaltar la diversidad y riqueza del terruño castellonense, se han definido seis subzonas vitícolas específicas: Alto Palancia, Alto Mijares, Maestrat, l’Alcalatén – Plana de L’Arc, Costera y Els Ports. Esta subdivisión ayudará a identificar y valorizar las particularidades de cada área.
- Diferenciación de variedades tradicionales: Se establece una clara distinción entre las variedades de uva tradicionales de Castellón, denominadas prioritarias, y las variedades complementarias. Esta medida busca poner en valor la herencia vitivinícola de la región y promover las variedades autóctonas.
- Menciones especiales en el etiquetado: Con el objetivo de resaltar la procedencia y características únicas de los vinos, se introducirán menciones especiales en el etiquetado como ‘Vino de Pueblo’ o ‘Vino de Finca’. Estas menciones ayudarán a los consumidores a identificar vinos con características específicas y origen definido.
La evolución natural de los vinos de Castellón
La transición de IGP a DOP no solo representa un reconocimiento a la calidad y tradición de los vinos de Castellón, sino que también abre nuevas oportunidades para los viticultores locales, fortaleciendo la identidad de la región en el mercado vitivinícola tanto nacional como internacional.
El presidente de la IGP Castelló, Juan Carlos Pavía, señala que ‘la aprobación del nuevo pliego de condiciones es un paso fundamental para el reconocimiento de la excelencia de nuestros vinos. Siendo DOP Castelló, podremos equipararnos al resto de denominaciones de origen de la Comunitat Valenciana y, en consecuencia, obtener una mayor visibilidad en el mercado enológico dentro y fuera de nuestro país. La calidad la tenemos – continúa Pavía – y el trabajo que vamos a hacer para que se nos reconozca dentro de las denominaciones de origen protegidas de toda España es una labor importante’.
La propuesta ahora está en manos de la Conselleria de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, que revisará el pliego de condiciones y lo remitirá al Ministerio de Agricultura, donde se supervisará antes de enviarlo a la Unión Europea, desde donde se hará la aprobación definitiva de la DOP. Se espera que este proceso culmine en los próximos meses, marcando un hito histórico para la viticultura de Castellón.
La IGP Castelló está compuesta actualmente por 14 bodegas de diferentes áreas de la geografía castellonense: Alcovi, Cooperativa de Viver, Barón d´Alba, Bellmunt Oliver Viticultors, El Mollet vino y cultura, Flors, Les Useres, Mas de Rander, Besalduch Valls & Bellmunt, La Canetana, L´Estanquer, Vizuecos, Vega Palancia y Barranc del Cirers.